Liubliana, la nueva Praga
I. Introducción:
Rodeada de idílicas montañas y atravesada por el Río Ljubjanica, Liubliana es aún una gran desconocida para los viajeros. Conocida como 'la nueva Praga' por sus similitudes con la capital checa, pero en dimensiones más reducidas, ostenta ese aroma de las bellas capitales centroeuropeas.Sus callejuelas adoquinadas, su pintoresco casco histórico, sus preciosos puentes y su castillo medieval dotan a Liubliana de ese aura y de esa majestuosidad de aquellos rincones que han gozado de un relevante pasado. En sus calles encontrarás señas de su historia como villa romana, de su devenir en el Imperio Austrohúngaro y en la extinta Yugoslavia, pero también rasgos de un Estado nuevo con un prometedor presente y futuro. Es una ciudad en ebullición, que dará que hablar en los próximos lustros.
Situada en el centro del país, la capital de Eslovenia, con 280.000 habitantes, es una villa que cuenta con la amabilidad de las urbes pequeñas y con las comodidades de los grandes núcleos urbanos. Y es que tiene un tamaño ideal para caminarla y para disfrutarla sin agobios. Además, fue elegida en 2016 como la Capital Verde Europea, por albergar esa perfecta combinación entre ciudad y espacios naturales. No lo dudes, Liubliana te espera con los brazos abiertos.
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| Panorámica de los alrededores del Río Ljubjanica / FUENTE: Archivo propio |
II. Qué ver en Liubliana:
8 lugares imprescindibles (los tienes que ver sí o sí): 📷1. Metelkova Mesto.
Es la cara diferente de la capital de Eslovenia, su rincón más transgresor, pero también uno de los que más llama la atención de los viajeros. El que fuera un cuartel del ejército austrohúngaro durante el siglo XIX, se ha convertido en paradigma de las nuevos movimientos urbanos.
Es un barrio a contracorriente dentro de una villa con tintes clásicos. Metelkova Mesto es un centro social autónomo, con vida desde 1993, donde los protagonistas son antiguos barracones militares, grafitis, esculturas con todo tipo de objetos, y mucho color y desorden. Es uno de los templos europeos del nuevo arte urbano donde todo el que quiera visitarlo es bienvenido. Es un sitio diferente donde los artistas pueden plasmar todo el arte que llevan dentro y que, sin duda, te proporcionará una imagen distinta de cuanto hubieras imaginado antes de aterrizar en Liubliana.
En las zonas aledañas a Metelkova Mesto, son altamente recomendables el Muzej Sodobne Umetnosti Metelkova -un museo de arte contemporáneo-, el Slovenski Etnografski Muzej -el Museo Etnográfico Esloveno-, el Narodni Muzej Slovenije-Metelkova -un espacio perteneciente al Museo Nacional de Eslovenia-, la iglesia Cerkev Srca Jezusovega -construida en ladrillo-, y el Stara Mestna Elektrarna-Elektro Ljubljana -curioso espacio de ocio levantado en una antigua planta de energía-.
2. Kongresni Trg.
Dejamos atrás la parte más rompedora de la ciudad, para dirigirnos a su centro histórico. Para ello, te sugiero tomar en Metelkova Mesto la calle Masarykova Cesta hacia la izquierda, donde disfrutarás de la estatua ecuestre de Rudolfu Maistru y del edificio Plečnik's Vzajemna Insurace Company Building. Cuando llegues al bulevar Slovenska Cesta, gira a la izquierda para caminar por la principal arteria de la urbe, donde se congregan gran número de tiendas, de restaurantes, de hoteles y de oficinas. Tras un agradable paseo de 1 kilómetro aproximadamente por la gran avenida de Liubliana, llegarás a la Kongresni Trg.
La Plaza del Congreso es una de las más conocidas de la ciudad y uno de sus rincones con más historia. Trazada en 1821 para el Congreso de la Santa Alianza, esta Plaza fue el lugar donde se proclamó la independencia de los eslovenos del Imperio Austrohúngaro en 1918 y donde una multitud recibió a los soldados del ejército de liberación de Tito a la conclusión de la Segunda Guerra Mundial en 1945.
Sus elementos más notables son la rectoría de la Univerza v Ljubljani -la Universidad de Liubliana-, la iglesia barroca Župnijska Cerkev sv. Trojice, el monumento Steber Sv. Trojice, el Muzej Iluzij -el Museo de las Ilusiones, sobre el que daremos más detalles más abajo-, la Slovenska Filharmonija -la Filarmónica Eslovena-, el edificio Kazina -de estilo neoclásico-, el monumento en honor a las víctimas de todas las guerras, la Casa Biedermeier -sede de la editorial eslovena más antigua, Slovenska Matica-, así como los monumentos Sidro y Kip Emonec. Además, esta Plaza en invierno acoge una muy activa pista de patinaje sobre hielo.
En las zonas cercanas, intenta no perderte el monumento Spomenik Narodnega Heroja Franca Rozmana Staneta, la Trg Republike -la Plaza de la República, la plaza más grande de la ciudad, lugar donde se proclamó la independencia de Eslovenia en 1991, y cuyos mayores puntos de interés son el Spomenik Revolucije (el monumento a la revolución), y dos de los edificios que la presiden, el Parlamento de Eslovenia y la Cankarjem Dom (la sala de convenciones más grande de la ciudad)-, los restos arqueológicos de Zgodnjekrščansko Središče, el Palacio de la Presidencia del Gobierno, el edificio Nemška Hiša, el teatro Slovensko Narodno Gledališče Drama Ljubljana, la estatua de Gustavu Mahlerju, el puente Šuštarski Most, la Slovenska Akademija Znanosti In Umetnosti -la Academia Eslovena de Artes y Ciencias-, la fuente Vodnjak Na Novem Trgu, la estatua Ivanu Hribarju, el monumento a Simona Gregorčiča, el museo Mestni Muzej Ljubljana, la pirámide Zoisova, el puente Šentjakobski Most, el teatro Krizanke, y el monumento de Antona Aškerca.
La Plaza del Congreso es una de las más conocidas de la ciudad y uno de sus rincones con más historia. Trazada en 1821 para el Congreso de la Santa Alianza, esta Plaza fue el lugar donde se proclamó la independencia de los eslovenos del Imperio Austrohúngaro en 1918 y donde una multitud recibió a los soldados del ejército de liberación de Tito a la conclusión de la Segunda Guerra Mundial en 1945.
Sus elementos más notables son la rectoría de la Univerza v Ljubljani -la Universidad de Liubliana-, la iglesia barroca Župnijska Cerkev sv. Trojice, el monumento Steber Sv. Trojice, el Muzej Iluzij -el Museo de las Ilusiones, sobre el que daremos más detalles más abajo-, la Slovenska Filharmonija -la Filarmónica Eslovena-, el edificio Kazina -de estilo neoclásico-, el monumento en honor a las víctimas de todas las guerras, la Casa Biedermeier -sede de la editorial eslovena más antigua, Slovenska Matica-, así como los monumentos Sidro y Kip Emonec. Además, esta Plaza en invierno acoge una muy activa pista de patinaje sobre hielo.
En las zonas cercanas, intenta no perderte el monumento Spomenik Narodnega Heroja Franca Rozmana Staneta, la Trg Republike -la Plaza de la República, la plaza más grande de la ciudad, lugar donde se proclamó la independencia de Eslovenia en 1991, y cuyos mayores puntos de interés son el Spomenik Revolucije (el monumento a la revolución), y dos de los edificios que la presiden, el Parlamento de Eslovenia y la Cankarjem Dom (la sala de convenciones más grande de la ciudad)-, los restos arqueológicos de Zgodnjekrščansko Središče, el Palacio de la Presidencia del Gobierno, el edificio Nemška Hiša, el teatro Slovensko Narodno Gledališče Drama Ljubljana, la estatua de Gustavu Mahlerju, el puente Šuštarski Most, la Slovenska Akademija Znanosti In Umetnosti -la Academia Eslovena de Artes y Ciencias-, la fuente Vodnjak Na Novem Trgu, la estatua Ivanu Hribarju, el monumento a Simona Gregorčiča, el museo Mestni Muzej Ljubljana, la pirámide Zoisova, el puente Šentjakobski Most, el teatro Krizanke, y el monumento de Antona Aškerca.
3. Prešernov Trg.
Continuamos por la calle Wolfova Ulica y en menos de 300 metros arribaremos a la Prešernov Trg. Seguramente, la Plaza Prešernov sea uno de los espacios más lindos de 'la nueva Praga'. Es el epicentro del casco histórico de la villa y uno de sus puntos imperdibles y de mayor animación. Ubicada a orillas del Río Ljubjanica, te enamorará con esa mezcla de clasicismo y majestuosidad tan propia de las ciudades del centro de Europa.
Los mayores atractivos de la Plaza son la iglesia Frančiškanska Cerkev Marijinega Oznanenja -inconfundible con su fachada de color rosado oscuro, que fue levantada en el siglo XVII en estilo barroco temprano, y que es uno de los templos más bellos de la ciudad-, el puente Tromostovje -el Puente Triple, un grupo de tres puentes de piedra que permiten cruzar el cauce del Ljubjanica, y que es uno de los símbolos de la capital de Eslovenia-, y la estatua de France Prešeren -célebre poeta esloveno autor del himno nacional-, que dirige su mirada hacia la fachada del número 4 de la calle Wolfova Ulica, donde yace una estatua de Prešeren Julija Primič, el amor no correspondido del poeta.
En sus alrededores, aparte de pasear por sus preciosas callejuelas medievales que te recordarán a Praga, saca tiempo para ver el teatro Mestno Gledališče Ljubljansko, así como el Čudnova Hiša, el Krisperjeva Hiša y el Vurnikova Hiša -tres históricos edificios-.
Los mayores atractivos de la Plaza son la iglesia Frančiškanska Cerkev Marijinega Oznanenja -inconfundible con su fachada de color rosado oscuro, que fue levantada en el siglo XVII en estilo barroco temprano, y que es uno de los templos más bellos de la ciudad-, el puente Tromostovje -el Puente Triple, un grupo de tres puentes de piedra que permiten cruzar el cauce del Ljubjanica, y que es uno de los símbolos de la capital de Eslovenia-, y la estatua de France Prešeren -célebre poeta esloveno autor del himno nacional-, que dirige su mirada hacia la fachada del número 4 de la calle Wolfova Ulica, donde yace una estatua de Prešeren Julija Primič, el amor no correspondido del poeta.
En sus alrededores, aparte de pasear por sus preciosas callejuelas medievales que te recordarán a Praga, saca tiempo para ver el teatro Mestno Gledališče Ljubljansko, así como el Čudnova Hiša, el Krisperjeva Hiša y el Vurnikova Hiša -tres históricos edificios-.
4. Mestna Hiša.
Llegó el momento de visitar el otro margen del Ljubjanica. Para ello, no hay ninguna forma mejor de hacerlo que a través del icónico Puente Triple. Acto seguido, continuamos recto por la calle Stritarjeva Ulica, y en apenas unos 150 metros llegaremos a la plaza donde se alza el Mestna Hiša, el ayuntamiento de Liubliana. Este área de la capital eslovena es un lindo vecindario compuesto por callecitas flanqueadas por elegantes edificaciones, que se halla rodeado en un costado por el Río y en el otro por la colina del Castillo.
El ayuntamiento se emplaza en la Plaza Mestni Trg, conformando con la fuente Robbov Vodnjak -la fuente de los tres ríos de la región de Carniola, una de las más lindas de la ciudad, y construida a imagen y semejanza de las fuentes de Roma-, y con los edificios de los alrededores una inmejorable estampa.
El ayuntamiento, construido en el siglo XV, es de una gran belleza. Coronado por una torre con un reloj, destaca por su fachada de influencia veneciana y por los arcos de su entrada. En su interior, sobresalen la estatua de Hércules con un león, la arcada de su patio interior, y la fuente de Narciso.
A este lado del Ljubjanica y bastante cerca del ayuntamiento, disfruta también del edificio Souvanova Hiša, y de la Mestna Galerija Ljubljana -la Galería de Arte de la Ciudad de Liubliana-. Algo más lejos son sumamente atractivas la galería fotográfica Galerija Fotografija Družba Za Vizualno Kulturo d.o.o, y las iglesias Župnijska Cerkev sv. Jakoba, y Cerkev sv. Florjana. Y no desperdicies la oportunidad de pasear por la orilla del Río, es una delicia.
Llegó el momento de visitar el otro margen del Ljubjanica. Para ello, no hay ninguna forma mejor de hacerlo que a través del icónico Puente Triple. Acto seguido, continuamos recto por la calle Stritarjeva Ulica, y en apenas unos 150 metros llegaremos a la plaza donde se alza el Mestna Hiša, el ayuntamiento de Liubliana. Este área de la capital eslovena es un lindo vecindario compuesto por callecitas flanqueadas por elegantes edificaciones, que se halla rodeado en un costado por el Río y en el otro por la colina del Castillo.
El ayuntamiento se emplaza en la Plaza Mestni Trg, conformando con la fuente Robbov Vodnjak -la fuente de los tres ríos de la región de Carniola, una de las más lindas de la ciudad, y construida a imagen y semejanza de las fuentes de Roma-, y con los edificios de los alrededores una inmejorable estampa.
El ayuntamiento, construido en el siglo XV, es de una gran belleza. Coronado por una torre con un reloj, destaca por su fachada de influencia veneciana y por los arcos de su entrada. En su interior, sobresalen la estatua de Hércules con un león, la arcada de su patio interior, y la fuente de Narciso.
A este lado del Ljubjanica y bastante cerca del ayuntamiento, disfruta también del edificio Souvanova Hiša, y de la Mestna Galerija Ljubljana -la Galería de Arte de la Ciudad de Liubliana-. Algo más lejos son sumamente atractivas la galería fotográfica Galerija Fotografija Družba Za Vizualno Kulturo d.o.o, y las iglesias Župnijska Cerkev sv. Jakoba, y Cerkev sv. Florjana. Y no desperdicies la oportunidad de pasear por la orilla del Río, es una delicia.
El ayuntamiento y la Catedral de Liubliana apenas se distancian en 100 metros. Por tanto, apenas tendrás que dar unos pocos pasos por la Ciril-Metodov Trg para llegar al templo religioso más destacado de la urbe.
La Catedral de Liubliana, también conocida como la Catedral de San Nicolás, es una basílica de estilo barroco construida en el siglo XVIII. De exteriores de color ocre claro, domina la estampa del skyline de la ciudad merced a su enorme cúpula verde y a sus dos ingentes campanarios. Como curiosidad, en su puerta principal el escultor Tone Demšar representó la historia de Eslovenia. De sus interiores, destacan sus frescos y sus estatuas barrocas.
Cerquita de la Catedral, procura pasarte también por el teatro de marionetas Lutkovno Gledališče Ljubljana, y por el puente Mesarski Most, famoso por ser el lugar en el que las parejas dejan un candado en señal de amor y por sus bellas esculturas.
6. Zmajski Most.
300 metros escasos separan la Catedral de Liubliana del puente Zmajski Most -en español, el Puente de los Dragones-. Puedes ir tanto por la Ciril-Metodov Trg como por la Adamič-Lundrovo Nabrežje, al lado del Río.
Lo que sí debes hacer, en cualquier caso, es durante el corto trayecto detenerte en el Mercado Central de Liubliana. Construido a orillas del Ljubjanica, su gran belleza arquitectónica se vislumbra en todo su esplendor desde el otro margen del corriente fluvial. Desde allí, podrás ver esta joya diseñada por Jože Plečnik con sus soportales mirando al Ljubjanica. A su vera, dependiendo del momento en el que pases por allí, podrás disfrutar también en la Plaza Vodnikov Trg de un animado e interesante mercado al aire libre y del monumento de Valentina Vodnika.
El Puente de los Dragones es seguramente el más bonito de los muchos que cruzan el Ljubjanica. Construido en 1901, se le considera uno de los mejores ejemplos de puente de estilo Art Nouveau del mundo. Dado el modesto caudal del Ljubjanica, no es de gran tamaño como otros emblemáticos puentes que traviesan los ríos más caudalosos de Europa. Sin embargo, tiene un especial encanto y se ha erigido en uno de los símbolos de la capital eslovena. Edificado en hormigón armado, su gran reclamo son las 4 grandes estatuas de dragones, el símbolo de Liubliana, que lo presiden. Todo un reclamo que, salvando las distancias y dimensiones, recuerda a los hermosos puentes de las capitales centroeuropeas procedentes del Imperio Austrohúngaro pero a pequeña escala.
En las proximidades del Puente de los Dragones, te gustarán también el edificio Peglezen, la enseña WOW Ljubljana, el Muzej Športa -museo de deportes-, y el monumento de Talcem Žrtvam Fašizma, así como el Hiša Eksperimentov -un museo de experimentos-.
7. Ljubljanski Grad.
Es el instante propicio para acercarse a otro de los grandes iconos de la ciudad, el Ljubljanski Grad. Para acceder al Castillo de Liubliana puedes hacerlo mediante un funicular que parte muy cerquita del Puente de los Dragones -en concreto, desde la Plaza Krekov Trg-, pero también a pie. Sin duda, ésta última es mi opción preferida. Para ello aproxímate a la calle Študentovska Ulica e inicia tu camino hacia la cima. No te voy a engañar, tiene algún tramo con un desnivel considerable, pero prefiero una ascensión por la naturaleza que utilizar transporte público.
El Castillo de Liubliana es uno de los mayores estandartes de la ciudad y uno de sus grandes emblemas. Edificado en el siglo XII, ha sufrido varias reconstrucciones y ampliaciones especialmente desde el siglo XVIII. Fue utilizado como almacén de armas, como prisión provisional e incluso como lugar de asilo de gente sin techo. En la actualidad, no obstante, se halla abierto al público y cuenta, entre otros espacios, con un museo virtual y con una exposición sobre la historia de Eslovenia.
En su recinto, también destacan algunas de sus torres -la de los Tiradores, la de Erasmo, la Pentagonal y la Panorámica-, la Capilla de San Jorge, sus murallas y su patio. Y, por supuesto, alberga uno de los mejores restaurantes de la ciudad, el Restavracija Strelec -sobre el que incidiremos más adelante-.
En las zonas aledañas al Castillo, te gustará el monumento Kmečkim Uporom, pero sobre todo te enamorarán sus excepcionales vistas desde las alturas de 'la nueva Praga'. Es una panorámica de ensueño, con la urbe abajo protegida por bucólicas montañas en sus alrededores. Sólo por las vistas ya vale la pena aproximarse al Castillo.
8. Rimski Zid Na Mirju.
Te propongo finalizar el recorrido por 'la nueva Praga' algo alejados de su centro histórico. Para ello, deja atrás el Castillo por la vía Osojna Pot. Después sigue por el callejón Reber -muy estrecho y con tramos de escaleras- y, posteriormente, gira a la izquierda por la Stari Trg, que en unos metros se convierte en la Levstikov Trg. Continúa hasta la calle Zoisova Cesta y allí toma este vial a la derecha. Cruzarás el Ljubjanica y continúa algunas manzanas más. Verás que más adelante la calle Zoisova Cesta pasa a denominarse Aškerčeva Cesta. Pues bien, cuando veas que la vía cambia de nombre, toma la primera calle a la izquierda y habrás llegado a la siguiente parada.
Rimski Zid Na Mirju son los restos de las murallas romanas de lo que en la antigüedad fue la ciudad romana de Emona. Dichos vestigios junto con los próximos de Emonska Hiša conforman el epicentro de los restos romanos existentes en la actualidad en la capital de Eslovenia. Entre su patrimonio, se han conservado parte de las murallas, elementos del foro, de una puerta de la ciudad y de una necrópolis, así como restos de casas y de un primitivo templo.
En las proximidades, son también dignos de ver el puente Plečnikov Most v Trnovem, la iglesia Župnijska Cerkev sv. Janeza Krstnika, el Museo Plečnikova Hiša, el Tehniški muzej Slovenije -el Museo Técnico de Eslovenia-, y el monumento en honor del físico esloveno Lavo Čermelj.
300 metros escasos separan la Catedral de Liubliana del puente Zmajski Most -en español, el Puente de los Dragones-. Puedes ir tanto por la Ciril-Metodov Trg como por la Adamič-Lundrovo Nabrežje, al lado del Río.
Lo que sí debes hacer, en cualquier caso, es durante el corto trayecto detenerte en el Mercado Central de Liubliana. Construido a orillas del Ljubjanica, su gran belleza arquitectónica se vislumbra en todo su esplendor desde el otro margen del corriente fluvial. Desde allí, podrás ver esta joya diseñada por Jože Plečnik con sus soportales mirando al Ljubjanica. A su vera, dependiendo del momento en el que pases por allí, podrás disfrutar también en la Plaza Vodnikov Trg de un animado e interesante mercado al aire libre y del monumento de Valentina Vodnika.
El Puente de los Dragones es seguramente el más bonito de los muchos que cruzan el Ljubjanica. Construido en 1901, se le considera uno de los mejores ejemplos de puente de estilo Art Nouveau del mundo. Dado el modesto caudal del Ljubjanica, no es de gran tamaño como otros emblemáticos puentes que traviesan los ríos más caudalosos de Europa. Sin embargo, tiene un especial encanto y se ha erigido en uno de los símbolos de la capital eslovena. Edificado en hormigón armado, su gran reclamo son las 4 grandes estatuas de dragones, el símbolo de Liubliana, que lo presiden. Todo un reclamo que, salvando las distancias y dimensiones, recuerda a los hermosos puentes de las capitales centroeuropeas procedentes del Imperio Austrohúngaro pero a pequeña escala.
En las proximidades del Puente de los Dragones, te gustarán también el edificio Peglezen, la enseña WOW Ljubljana, el Muzej Športa -museo de deportes-, y el monumento de Talcem Žrtvam Fašizma, así como el Hiša Eksperimentov -un museo de experimentos-.
7. Ljubljanski Grad.
Es el instante propicio para acercarse a otro de los grandes iconos de la ciudad, el Ljubljanski Grad. Para acceder al Castillo de Liubliana puedes hacerlo mediante un funicular que parte muy cerquita del Puente de los Dragones -en concreto, desde la Plaza Krekov Trg-, pero también a pie. Sin duda, ésta última es mi opción preferida. Para ello aproxímate a la calle Študentovska Ulica e inicia tu camino hacia la cima. No te voy a engañar, tiene algún tramo con un desnivel considerable, pero prefiero una ascensión por la naturaleza que utilizar transporte público.
El Castillo de Liubliana es uno de los mayores estandartes de la ciudad y uno de sus grandes emblemas. Edificado en el siglo XII, ha sufrido varias reconstrucciones y ampliaciones especialmente desde el siglo XVIII. Fue utilizado como almacén de armas, como prisión provisional e incluso como lugar de asilo de gente sin techo. En la actualidad, no obstante, se halla abierto al público y cuenta, entre otros espacios, con un museo virtual y con una exposición sobre la historia de Eslovenia.
En su recinto, también destacan algunas de sus torres -la de los Tiradores, la de Erasmo, la Pentagonal y la Panorámica-, la Capilla de San Jorge, sus murallas y su patio. Y, por supuesto, alberga uno de los mejores restaurantes de la ciudad, el Restavracija Strelec -sobre el que incidiremos más adelante-.
En las zonas aledañas al Castillo, te gustará el monumento Kmečkim Uporom, pero sobre todo te enamorarán sus excepcionales vistas desde las alturas de 'la nueva Praga'. Es una panorámica de ensueño, con la urbe abajo protegida por bucólicas montañas en sus alrededores. Sólo por las vistas ya vale la pena aproximarse al Castillo.
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| En la cima, el Castillo de Liubliana presidiendo la ciudad / FUENTE: Archivo propio |
Te propongo finalizar el recorrido por 'la nueva Praga' algo alejados de su centro histórico. Para ello, deja atrás el Castillo por la vía Osojna Pot. Después sigue por el callejón Reber -muy estrecho y con tramos de escaleras- y, posteriormente, gira a la izquierda por la Stari Trg, que en unos metros se convierte en la Levstikov Trg. Continúa hasta la calle Zoisova Cesta y allí toma este vial a la derecha. Cruzarás el Ljubjanica y continúa algunas manzanas más. Verás que más adelante la calle Zoisova Cesta pasa a denominarse Aškerčeva Cesta. Pues bien, cuando veas que la vía cambia de nombre, toma la primera calle a la izquierda y habrás llegado a la siguiente parada.
Rimski Zid Na Mirju son los restos de las murallas romanas de lo que en la antigüedad fue la ciudad romana de Emona. Dichos vestigios junto con los próximos de Emonska Hiša conforman el epicentro de los restos romanos existentes en la actualidad en la capital de Eslovenia. Entre su patrimonio, se han conservado parte de las murallas, elementos del foro, de una puerta de la ciudad y de una necrópolis, así como restos de casas y de un primitivo templo.
En las proximidades, son también dignos de ver el puente Plečnikov Most v Trnovem, la iglesia Župnijska Cerkev sv. Janeza Krstnika, el Museo Plečnikova Hiša, el Tehniški muzej Slovenije -el Museo Técnico de Eslovenia-, y el monumento en honor del físico esloveno Lavo Čermelj.
Mi rincón: 💎
El Park Tivoli, el parque más grande de 'la nueva Praga'. Es uno de los lugares favoritos tanto para los lugareños como para los visitantes de la urbe. Es ideal para hacer deporte o simplemente para relajarse rodeado de naturaleza, de bellas alamedas y de bucólicos estanques.
Sus puntos de mayor interés son el zoológico, la iglesia C. Marijinega Obiskanja, los monumentos de Edvarda Kocbeka, de Riharda Jakopiča, de Kip Dečka S Piščalko y de Ribe The Fish, el espacio Spominska Soba Ivana Cankarja, su espléndido invernadero, el centro de arte Mednarodni Grafični Likovni Center -sito en el bello Castillo Tivoli-, el museo de historia contemporánea Muzej Novejše Zgodovine Slovenije, la mansión Cekinov, y sus espacios para practicar deporte.
Las mejores vistas de la ciudad: 👀
Sus puntos de mayor interés son el zoológico, la iglesia C. Marijinega Obiskanja, los monumentos de Edvarda Kocbeka, de Riharda Jakopiča, de Kip Dečka S Piščalko y de Ribe The Fish, el espacio Spominska Soba Ivana Cankarja, su espléndido invernadero, el centro de arte Mednarodni Grafični Likovni Center -sito en el bello Castillo Tivoli-, el museo de historia contemporánea Muzej Novejše Zgodovine Slovenije, la mansión Cekinov, y sus espacios para practicar deporte.
En sus proximidades, resultan de gran interés el monumento Spominsko Obeležje Toni Mrlak -en honor de un piloto esloveno de helicóptero-, el Narodni Muzej Slovenije -el Museo Nacional de Eslovenia, sobre el que profundizaremos más adelante-, el Prirodoslovni Muzej Slovenije -el Museo de Historia Natural de Eslovenia-, la Ópera -sita en un edificio de imponente hermosura-, la Moderna Galerija Ljubljana -el Museo de Arte Moderno de Liubliana-, la Narodna Galerija -la Galería Nacional de Arte-, la iglesia Pravoslavna Cerkev sv. Cirila in Metoda v Ljubljani -bella iglesia ortodoxa-, y el Železniški Muzej -el Museo del Ferrocarril-.
Desde el Nebotičnik, obtendrás la mejor panorámica de la ciudad. Construido en 1933 bajo el mando del arquitecto esloveno Vladimir Šubic, se trata de un edificio de 70 metros de altura, que fue en su día la construcción más elevada de la extinta Yugoslavia y que en la actualidad se ha erigido en uno de los grandes símbolos de Liubliana.
III. Qué comer en Liubliana:
Una comida: 🍲
Idrijski Žlikrofi, una especie de raviolis muy típicos del oeste del país.Un dulce: 🎂
Potica, una torta enrollada rellena de nuez molida y miel, entre otros ingredientes.IV. Qué beber en Liubliana:
Una bebida: ☕
Žganje, un aguardiente que puede ser de infinidad de sabores; de ciruelas, de melocotón, de peras, de enebro o de arándanos, son algunos ejemplos.
Žganje, un aguardiente que puede ser de infinidad de sabores; de ciruelas, de melocotón, de peras, de enebro o de arándanos, son algunos ejemplos.
V. Dónde comer en Liubliana:
4 restaurantes: 🍴
Con vistas: Restavracija Strelec: Sito en el Castillo de Liubliana, se ha convertido en uno de los restaurantes mejor valorados de la ciudad. Su enclave privilegiado, que ofrece una de las más bellas estampas de la ciudad tanto desde sus interiores como desde su terraza, y su cocina de autor de raíces eslovenas, hacen de este restaurante una apuesta más que segura. De corte muy romántico, tiene diversas posibilidades para configurar los menús. Sus precios son elevados en comparación con otros establecimientos, pero merece la pena.
Grajska Planota 1, Liubliana.
Precio: €€€€
Un clásico: Gostilna Šestica: En la Slovenska Cesta, la principal arteria de la villa, justo enfrente del edificio Nebotičnik y a escasos 400 metros de la Kongresni Trg, se enclava este clásico de Liubliana. Inaugurado en 1776, está considerado como el restaurante más antiguo de la ciudad. Su ambientación de corte clásico, sus camareros ataviados con trajes tradicionales y su cocina de toda la vida, hacen que la visita a este restaurante sea una auténtica experiencia. Es sin duda uno de los mejores sitios para probar los platos de la gastronomía eslovena y los vinos del país. Además, atesora un bonito patio.
Slovenska Cesta 40, Liubliana.
Precio: €€-€€€
El favorito de los locales: Gostilna Dela: Bastante cerca del emblemático puente Zmajski Most, pero algo escondido, se encuentra esta auténtica joya oculta. Con preponderancia de la cocina local, este establecimiento prepara sabrosos platos estupendamente presentados y en abundantes cantidades. Además, sus precios son muy moderados. No es de extrañar la enorme popularidad que goza entre la gente local y la fama que está empezando a adquirir entre los viajeros. Todo un hallazgo.
Poljanska 7, 1000 Liubliana.
Precio: €
Si echas de menos la comida española: Španska Vas: Bastante alejado del centro histórico de la ciudad, a algo más de cuatro kilómetros en dirección noreste, se halla este establecimiento que prepara con acierto los grandes clásicos de la gastronomía española adaptados al paladar de los locales. Su terraza es muy agradable e ideal para los períodos de bonanza térmica.
Šmartinska Cesta 152, Liubliana.
Precio: €€-€€€
Wolfova Ulica 14, Liubliana.
Precio: €€-€€€
Lolita: Junto a uno de los márgenes del Río Ljubjanica y bastante próxima al famoso puente de Tromostovje, se enclava la pastelería más selecta de Liubliana. En un ambiente con una decoración exquisita y con una soberbia atención, este establecimiento es un auténtico santuario de los pasteles y de los dulces en general. Además, cuenta con una bonita terraza con vistas al Ljubjanica.
Cankarjevo Nabrežje 1, Liubliana.
Precio: €€-€€€
Grajska Planota 1, Liubliana.
Precio: €€€€
Un clásico: Gostilna Šestica: En la Slovenska Cesta, la principal arteria de la villa, justo enfrente del edificio Nebotičnik y a escasos 400 metros de la Kongresni Trg, se enclava este clásico de Liubliana. Inaugurado en 1776, está considerado como el restaurante más antiguo de la ciudad. Su ambientación de corte clásico, sus camareros ataviados con trajes tradicionales y su cocina de toda la vida, hacen que la visita a este restaurante sea una auténtica experiencia. Es sin duda uno de los mejores sitios para probar los platos de la gastronomía eslovena y los vinos del país. Además, atesora un bonito patio.
Slovenska Cesta 40, Liubliana.
Precio: €€-€€€
El favorito de los locales: Gostilna Dela: Bastante cerca del emblemático puente Zmajski Most, pero algo escondido, se encuentra esta auténtica joya oculta. Con preponderancia de la cocina local, este establecimiento prepara sabrosos platos estupendamente presentados y en abundantes cantidades. Además, sus precios son muy moderados. No es de extrañar la enorme popularidad que goza entre la gente local y la fama que está empezando a adquirir entre los viajeros. Todo un hallazgo.
Poljanska 7, 1000 Liubliana.
Precio: €
Si echas de menos la comida española: Španska Vas: Bastante alejado del centro histórico de la ciudad, a algo más de cuatro kilómetros en dirección noreste, se halla este establecimiento que prepara con acierto los grandes clásicos de la gastronomía española adaptados al paladar de los locales. Su terraza es muy agradable e ideal para los períodos de bonanza térmica.
Šmartinska Cesta 152, Liubliana.
Precio: €€-€€€
2 templos de dulces: 🍫
Zvezda: Abierta en 1999 en una de las esquinas de la Kongresni Trg, se ha convertido en la pastelería de referencia de la ciudad. Todos sus pasteles son celestiales. La especialidad de la casa es el Zvezda Cake, una tarta a base de mascarpone y cerezas coronada con una capa con sabor a fresa, que es una verdadera delicia. Su terraza en uno de los vértices de la Plaza del Congreso es muy recomendable. Tal es su éxito, que aparte de esta pastelería en su ubicación original, cuenta con otros varios establecimientos en la ciudad.Wolfova Ulica 14, Liubliana.
Precio: €€-€€€
Lolita: Junto a uno de los márgenes del Río Ljubjanica y bastante próxima al famoso puente de Tromostovje, se enclava la pastelería más selecta de Liubliana. En un ambiente con una decoración exquisita y con una soberbia atención, este establecimiento es un auténtico santuario de los pasteles y de los dulces en general. Además, cuenta con una bonita terraza con vistas al Ljubjanica.
Cankarjevo Nabrežje 1, Liubliana.
Precio: €€-€€€
VI. Qué hacer en Liubliana:
2 museos imprescindibles: 🎨
Narodni Muzej Slovenije: Sito en las inmediaciones del Park Tivoli, el Museo Nacional de Eslovenia es uno de los espacios museísticos de mayor prestigio de la capital eslovena. Cuenta con una amplia e interesante colección de objetos arqueológicos y de monedas. Su joya de la corona es la flauta neandertal de Divjie Babe, que está considerada como el instrumento musical más antiguo del planeta.
Muzejska Ulica 1, Liubliana.
Muzej Iluzij: Localizado en la céntrica Kongresni Trg, es el espacio ideal para pasar un rato ameno con la pareja, familiares o amigos. Experimentarás distintos tipos de ilusiones ópticas que te dejarán atónito, te sorprenderán y te harán reír a carcajadas. Un museo distinto y divertido.
Kongresni Trg 13, Liubliana.
Trieste: ¿Quieres disfrutar del bello litoral marítimo italiano? Pues a poco más de 90 kilómetros en dirección suroeste de la capital de Eslovenia se enclava Trieste, una hermosa ciudad costera del noreste de Italia. A orillas del Adriático, es una histórica y hermosa ciudad que vive por y para el mar, y que goza de un patrimonio arquitectónico digno de admiración. En el camino de regreso, te aconsejo que te desvíes hacia el sur del país para ver la cueva de Postojna -uno de los parajes subterráneos más bellos del Viejo Continente-, y el Castillo de Predjama -construido en estilo renacentista sobre un acantilado en la entrada de una cueva-.
Muzejska Ulica 1, Liubliana.
Muzej Iluzij: Localizado en la céntrica Kongresni Trg, es el espacio ideal para pasar un rato ameno con la pareja, familiares o amigos. Experimentarás distintos tipos de ilusiones ópticas que te dejarán atónito, te sorprenderán y te harán reír a carcajadas. Un museo distinto y divertido.
Kongresni Trg 13, Liubliana.
VII. Excursiones desde Liubliana:
2 excursiones recomendables: 🚌
Bled: Te recomiendo encarecidamente que te desplaces unos 50 kilómetros al noroeste de Liubliana para que conozcas de primera mano la Eslovenia alpina. Bled es una hermosa localidad conocida por la belleza de sus rincones sita a orillas del lago de nombre homónimo. Su imponente castillo y su isla en el lago son sus dos grandes estandartes. En sus alrededores, déjate seducir por la hermosa naturaleza de la cascada de Šum y por la garganta de Vintgar.Trieste: ¿Quieres disfrutar del bello litoral marítimo italiano? Pues a poco más de 90 kilómetros en dirección suroeste de la capital de Eslovenia se enclava Trieste, una hermosa ciudad costera del noreste de Italia. A orillas del Adriático, es una histórica y hermosa ciudad que vive por y para el mar, y que goza de un patrimonio arquitectónico digno de admiración. En el camino de regreso, te aconsejo que te desvíes hacia el sur del país para ver la cueva de Postojna -uno de los parajes subterráneos más bellos del Viejo Continente-, y el Castillo de Predjama -construido en estilo renacentista sobre un acantilado en la entrada de una cueva-.
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